El próximo sábado 23 de agosto, Casa Blanca Petit Hotel en Melo se transformará en el escenario de una experiencia gastronómica única, de la mano de la talentosa chef Virginia Marcos. Con un recorrido que combina formación, creatividad y pasión por la cocina, Virginia promete sorprender a los comensales con un menú pensado para resaltar los productos locales y ofrecer sabores que cuentan historias.
Una chef que vuelve a sus raíces
Virginia Marcos es uno de esos jóvenes que, tras capacitarse y acumular experiencias fuera de su localidad, regresan para aplicar todo lo aprendido y potenciar la gastronomía de su región. Formada en Río Cuarto y con paso por la Escuela Patagónica, Virginia se trasladó a Buenos Aires, donde trabajó en destacados restaurantes, incluyendo el del reconocido chef Germán Martitegui. Allí, tuvo la oportunidad de experimentar con una gran variedad de productos de todo el país, lo que le permitió valorar la riqueza de los ingredientes locales y pensar en cómo incorporarlos de manera innovadora en sus platos.
“Para mí, la cocina es más que preparar comida: es un arte, una filosofía de vida. Cada plato que servimos lleva detrás una historia, una técnica y una intención de transmitir sensaciones”, explica Virginia.
Revalorizar lo local: una filosofía en cada plato
La chef destaca que su propuesta no solo apunta a la creatividad y la técnica, sino también a dar visibilidad y valor a los productores de la zona. Gracias a su trabajo conjunto con Casa Blanca Petit Hotel, el Hotel Colonial de Laboulaye y la Sociedad Rural de la región, Virginia está elaborando un menú que integra productos frescos, de temporada y de la región, permitiendo a los comensales descubrir lo que realmente se produce cerca de casa.
“Muchas veces consumimos productos importados o traídos de otras ciudades, y no valoramos lo que tenemos a nuestro alrededor. Acá hay productores con productos de calidad excepcional, y eso queremos mostrar”, agrega la chef.
Un menú pensado para disfrutar
La velada del 23 de agosto en Casa Blanca Petit Hotel incluirá un menú completo con recepción, entrada, plato principal, postre y sorpresas entre cada paso. Entre los destacados se encuentran:
- Recepción: Focaccia con paté de Chacinados Don Eduardo de Serrano, acompañada de verduras frescas de temporada.
- Entrada: Sopa de zapallo cabutia con queso azul, cebollitas crocantes y una delicada salsita verde.
- Plato principal: Polenta cremosa con ossobuco braseado durante seis horas, acompañado de repollitos de Bruselas asados, todos productos de temporada.
- Postre: Panacota con quinotos en almíbar y praliné de nueces pecanas, también de productores locales.
Todos los platos estarán maridados por vinos seleccionados por Adriana Musso y Cautiva Wine Club, logrando la combinación perfecta entre sabores, texturas y aromas.
Una experiencia para todos los sentidos
Virginia enfatiza que la propuesta no requiere conocimientos previos sobre cocina o vinos: “No hace falta saber de gastronomía ni de maridajes. Solo hay que relajarse, disfrutar del ambiente, de la compañía y de cada sabor que ofrecemos”. La chef invita a los comensales a vivir la experiencia completa, en un ambiente cálido, con servicio de excelencia y un recorrido culinario pensado para deleitar todos los sentidos.
Próxima parada: Laboulaye
Tras su presentación en Melo, Virginia Marcos llevará su propuesta al Hotel Colonial de Laboulaye, continuando con la misma filosofía de resaltar los productos locales y ofrecer experiencias gastronómicas únicas en la región.
Reservas en Melo: Casa Blanca Petit Hotel, Caseros 36, Melo.
Con su regreso a la región, Virginia Marcos se suma a una corriente de jóvenes que, tras capacitarse en grandes ciudades, vuelven a sus raíces para impulsar la gastronomía local y promover los talentos y productos de la zona. Una oportunidad única para disfrutar de sabores auténticos y de una experiencia gourmet que promete quedarse en la memoria de quienes asistan.


